La monovisión es una técnica en la que el ojo dominante se corrige para que enfoca la visión lejana y el no dominante, la visión cercana. Esta intervención se lleva a cabo manteniendo una miopía leve en el ojo para la visión cercana que permita después una buena visión conjunta de ambos ojos, tanto de lejos como de cerca, e independientemente de las gafas.
Esto se logra calculando las potencias de las lentes monofocales de forma que se obtenga una buena visión de lejos y una visión correcta de cerca en visión binocular.
La monovisión también se logra con la técnica LASIK (cirugía lamelar) o la PRK (cirugía de superficie). Se trata de la monovisión avanzada.